No me digas, en números tristes,
¡La vida no es más que un sueño vacío! –
Porque el alma está muerta, que duerme,
Y las cosas no son lo que parecen.
La vida es real ! La vida es seria!
Y la tumba no es su objetivo;
Polvo eres, al polvo volverás,
No se hablaba del alma.
No disfrute, ni dolor.
Es nuestro fin o camino destinado;
Pero para actuar, que cada mañana.
Encuéntrenos más lejos que hoy.
El arte es largo, y el tiempo es fugaz.
Y nuestros corazones, aunque fuertes y valientes,
Aún así, como tambores apagados, están latiendo.
Marchas funerarias a la tumba.
- ¿Las personas usan las fuentes por masa, peso o volumen?
- ¿Cómo sabríamos que encontramos la luz más antigua? ¿Podemos medir la edad de la luz, ya que viaja a diferentes velocidades a través de la gravedad?
- ¿Por qué el concepto hindú de Karma no es científicamente cierto?
- Tabla periódica: ¿Qué es el elemento 117 (Uus)? ¿Cuáles son sus propiedades?
- ¿Qué tan significativo es el éxito de Mangalyaan en India?
En el amplio campo de batalla del mundo,
En el vivac de la vida,
¡No seas como el ganado mudo y arrastrado!
¡Sé un héroe en la lucha!
¡No confíes en el futuro, pero eres agradable!
¡Que los muertos pasados entierren a sus muertos!
Actuar, actuar en el presente vivo!
¡Corazón adentro, y Dios, cabeza arriba!
Las vidas de grandes hombres nos recuerdan
Podemos hacer nuestras vidas sublimes,
Y, partiendo, dejanos atrás.
Huellas en las arenas del tiempo;
Huellas, que tal vez otra,
Navegando por el solemne principal de la vida,
Un hermano desolado y naufragado,
Viendo, volverá a tomar el corazón.
Seamos, pues, levantados y haciendo,
Con un corazón para cualquier destino;
Aún logrando, aún persiguiendo,
Aprende a laborar y esperar.
El poema anterior, Salmo de la vida , fue escrito por Henry Wadsworth Longfellow en 1838. En mi opinión, describe perfectamente la vida. Cómo vivirlo y amarlo.