Cuando hablamos de un movimiento político, es importante recordar el contexto histórico. Muchos liberales modernos de hoy habrían sido silenciados completamente en el pasado, como mujeres de color, miembros de grupos LGBT, católicos, judíos, etc. Hubo muchas fortalezas en los primordiales grupos feministas blancos de principios del siglo XX, pero también muchos escollos. Lo mismo ocurre con los grupos de derechos laborales de los hombres. Con el tiempo, estos grupos comenzaron a fusionarse de diferentes maneras por causas comunes, como el Movimiento por los Derechos Civiles en los años 60, la protesta de la guerra de Vietnam en los años 70 y el movimiento activista contra el SIDA hasta los 90. Estas combinaciones permitieron a los liberales de todos los orígenes aprender unos de otros, y esa fusión de mentalidades continuó con la globalización y la introducción de teléfonos celulares e Internet. Se hizo muy fácil encontrar liberales de ideas afines si te sentías cómodo en tu nicho, o para expandirte y explorar la nueva riqueza de información sobre personas diferentes a ti mismo.
Esta es la razón más importante por la que parece que la “corrección política” se produjo tan rápidamente. La facilidad de comunicación en línea permitió una propagación desenfrenada de insultos, y la comunidad global combinada de liberales y otros los encontraron perjudiciales. Idealmente, detener la propagación de un insulto sería un primer paso simple para reconocer la historia de odio asociada, pero como sabemos, ha dado lugar a mucha actitud defensiva y otros comportamientos duragatorios que han sido contraproducentes en términos de calmar el discurso de odio La Internet.
