Cómo comercializar una nueva idea filosófica.

Comprenda dónde están las personas que probablemente querrán que su “producto” pase el rato, vaya allí, únase a las conversaciones, sea genuinamente curioso acerca de ellos, cuando los haya hecho sentir cómodos y proporcione algo de valor presente su idea.

Esté preparado para el hecho de que no muchos de ellos se prenden. Enfoca tu tiempo en aquellos que lo consiguen. En una multitud de 1000, una sola conversión es un buen resultado.

Piensa en cómo te sentirías si alguien se te acercara y te metiera su filosofía en la garganta.

Solía ​​ser que las carteleras más grandes y la mayoría del producto. Hoy en día (gracias a Dios) en marketing, necesita construir una relación con su “cliente”.

1) averiguar dónde cuelgan
2) ir allí
3) interactuar
4) proporcionar valor
5) presentar su producto

¿Se siente como una rutina? ¡Sip!

¿Vale la pena? Solo si el mercado lo decide.

¿Por qué alguien haría eso? Porque realmente creen que su producto agrega valor a la vida de las personas y que la historia demostrará que tienen razón.