¿Cómo debemos inspirar a las generaciones futuras para resolver los problemas más grandes del mundo?

Empezando por nosotros mismos.

Si cada generación quiere que la generación futura resuelva los problemas difíciles de resolver, entonces el resultado lógico es que los problemas nunca se resolverán.

Y el problema de la solución tiene que lidiar con la causa fundamental de la misma, pero no con los efectos, la causa intermedia que también es la que está en el medio de la cadena de causa – efecto.

Vea cuán egoístas y malignos somos: agotamos la energía geotérmica limitada en la Tierra, asumamos que el flujo debilitado de la lava en la Tierra no afectará la fuerza del campo magnético que nos protege de las radiaciones del cosmos y las partículas solares, mantenga la atmósfera, mantener la superficie de la Tierra dispareja para mantener la tierra y el clima,… solo contaminar el medio ambiente con pesticidas, herbicidas, plásticos, químicos dañinos… y esperar que la naturaleza pueda hacer frente a todos estos problemas; nuestro interés actual es primordial.

Pobre o rico, todos queremos más, todos merecemos más, queremos que todos ganen. Pero solo nos olvidamos de las generaciones futuras, solo porque aún no han nacido. Lo que les dejamos es todo el sangriento lío que hicimos para que se enfrenten, para resolver. ¿Cómo pueden resolver el problema cuando es un proceso irreversible?

¿Inspirando a las futuras generaciones? ¿Con que? ¿Palabras vacías?

Haga que sean conscientes de los problemas del mundo desde una edad temprana y aliéntelos a pensar por sí mismos.