Existe una continuidad de nuestra certeza sobre la verdad de una idea:
- Conocimiento. Estamos tan seguros de que una idea es verdadera que no podemos concebir un universo en el que sea falsa. A menudo es abstracto y no empírico. (por ejemplo, 1 + 1 = 2 )
- Aceptación. Una idea está respaldada por toda la evidencia empírica y la experiencia más subjetiva, es decir, nosotros y cada persona sensata siempre vemos que es verdad. (por ejemplo, el sol saldrá mañana )
- Opinión positiva. Una idea tiene más apoyo que evidencia contradictoria, por lo que asumimos su verdad. En ausencia de evidencia empírica adecuada podemos considerar la experiencia subjetiva. (Por ejemplo , consideramos que estas verdades son evidentes, que todos los hombres son creados iguales … )
- Ambivalencia. Estamos indecisos sobre la verdad de una idea. Puede haber una falta de evidencia, un balance de evidencia, o puede que no nos importe. (Ej. Hay vida en otra parte de nuestra galaxia ).
- Opinión negativa. Una idea tiene más contradicción que evidencia de apoyo, por lo que asumimos su falsedad. (por ejemplo, el ginseng cura el resfriado común )
- Rechazo. Una idea se contradice con toda la evidencia empírica y la experiencia más subjetiva, es decir, nosotros y cada persona sensata siempre vemos que es falsa. (por ejemplo yo puedo volar )
- Falsedad. Estamos seguros de que una idea es Falso y ni siquiera podemos concebir un universo donde sea verdadero. (p . ej . no existe )
En cada punto de este continuo, excepto el 1 y el 7, hay un grado en el que consideramos que la idea es verdadera y un grado complementario en el que consideramos que es falsa. Lo primero es creencia y lo segundo es duda . Y, a excepción de las ideas que sabemos que son ciertas, la creencia siempre está acompañada por un grado complementario de duda.