La expresión alemana ‘Tatsachen’ se traduce en ambas traducciones como ‘hechos’, pero la expresión alemana ‘Sachverhaltes’ se traduce en Ogden como ‘hechos atómicos’ y en las Peras y McGinnis como ‘estados de cosas’. El valor filosófico en efectivo de los diferentes tratamientos de ‘Sachverhaltes’ es que dado que los hechos atómicos parecen ser una subclase de hechos, y dado que los hechos (cualquiera sea el caso) son del mundo real, los Sachverhaltes son también del mundo real. Esto sugiere que la ontología de Wittgenstein abarca solo lo que es real y no incluye meramente hechos posibles. Al traducir ‘Sachverhaltes’ como ‘estados de cosas’, la traducción de Pears y McGinnis acomoda una comprensión de la metafísica de Tractarian según la cual existen simplemente mundos posibles, es decir, mundos compuestos de estados de cosas, que son simplemente hechos posibles.
Una complicación es que Wittgenstein habla con frecuencia de la existencia y la no existencia (Bestehen y Nichtbestehen) de Sachverhalten. Por ejemplo, 2.06 Das Bestehen und Nichtbestehen von Sachverhalten ist die Wirklichkeit. (Das Bestehen von Sachverhalten nennen wir también es positivo, das Nichtbestehen eine negativo Tatsache) Podemos seguir a Black (1964, p. 39) y convertir a Bestehen y Nichtbestehen en este contexto como estado de tenencia y no tenencia. En contra de la traducción de Ogden, es natural considerar un “hecho que no existe o no se sostiene” como ningún hecho en absoluto.