¿De qué manera evolucionará el pensamiento científico en el próximo siglo?

En el siglo dieciocho, los “dueños del capital” decidieron que la velocidad de su enriquecimiento aumentaría significativamente si logran forzar a la humanidad a renunciar a Dios.
Para la “negación científica de Dios”, los dueños del capital contrataron a los mejores intelectuales de Europa y lograron el resultado: la civilización humana ha abandonado la fe en Dios.
La civilización humana (incluida la ciencia) eligió el camino equivocado, lo que nos llevó a un callejón sin salida.

El único camino para el retorno de la humanidad al camino correcto de desarrollo (al camino evolutivo) es restaurar la Fe en Dios.
Y, por supuesto, los “dueños del capital” deberían atraer a los mejores intelectuales del mundo para “pruebas científicas de Dios”.

¿Puede la “prueba científica de Dios” armonizar la situación económica y política del planeta?
Ciertamente si.
Solo la “prueba científica de Dios” puede reconciliar la ciencia y la religión, puede igualar las posibilidades de ricos y pobres, puede detener la lucha por el poder en el planeta Tierra.

La era del ateísmo termina.
Es hora de volver a Dios.
Si la civilización humana no regresa a Dios, nuestros hijos no tendrán el futuro.